¿Qué tipo de radiación emiten los aparatos de bronceado artificial? El principal tipo de radiación ultravioleta al que nos exponemos cuando tomamos sesiones de bronceado artificial se conoce como rayos UVA.
Cada persona tiene un determinado tipo de piel y por lo tanto no responde de la misma manera frente a la radiación ultravioleta, una exposición inadecuada conlleva una serie de riesgos, como pueden ser: lesiones dermatológicas (fotoenvejecimiento, fotosensibilización), aumentar el riesgo de melanoma y de otros cánceres de piel, lesiones oftalmológicas (fotoqueratitis, fotoconjuntivitis, fotofobia)…
Riesgos por los que se hace pertinente la puesta en marcha de medidas que protejan la salud, en nuestra comunidad autónoma se ha desarrollado una legislación específica para completar la legislación existente a nivel nacional.
¿Cómo es la piel?
La piel está compuesta por 3 capas bien diferenciadas:
La más superficial ó epidermis, aquí se encuentran las células que proporcionan la función barrera a la piel (queratinocitos), las que producen el color y son responsables del bronceado (melanocitos).
Capa media ó dermis, en ella se encuentra el "esqueleto" de la piel, es la que confiere la elasticidad, en ella están los vasos sanguíneos (arterias y venas) que nutren la piel y aquí reside el sentido del tacto (nervios).
Capa más profunda o hipodermis, también conocida cómo panículo adiposo. Es la grasa que nutre y protege de los traumatismos, de la pérdida de calor etc., es un verdadero colchón biológico.
Tomar el sol se ha considerado un hábito
saludable, pero un exceso de sol en determinados
tipos de piel puede provocar ciertos problemas, como
quemaduras solares, arrugas, pigmentaciones, cambios de
la textura de la piel, y, lo que es más importante cáncer de piel.
El betacaroteno es imprescindible para fortalecer la
autoprotección interna de la piel. Se encuentra en
frutas y verduras de color intenso (rojo, naranja,
amarillo, verde).Los ácidos grasos insaturados, como el oleico del
aceite de oliva o el omega-3 del pescado azul,
evitan la deshidratación de la piel.El selenio (levadura de cerveza, salvado y germen de
trigo, aguacate, ajos, cebolla…) y el zinc (marisco,
legumbres, semillas de calabaza) son dos minerales
beneficiosos para la piel.
El sol tiene una gran importancia para la salud del hombre. Dependiendo de las características de la persona y del tiempo de exposición a sus radiaciones, va a producir sobre el organismo una serie de repercusiones que pueden ser positivas o negativas.
* la reverberación (o radiación reflejada) Los diferentes tipos de suelo reflejan los rayos ultravioleta en distinta medida según se trate de:
nieve (50 a 90%)
arena (15 a 25%)
agua (10 a 20 %) Sin olvidar que el agua deja pasar, además, un 90% de los rayos UV.
hierba o césped (0,5 a 4%).