Los motivos religiosos ya no serán excusa para no vacunar a los niños en California. El Senado de dicho estado acaba de aprobar una normativa que obliga a vacunar a los hijos. La norma fue propuesta por los senadores demócratas Richard Pan y Ben Allen tras el brote de sarampión que se detectó el pasado mes de diciembre en Disneylandia, y cuyos efectos se dispararon debido a los bajos índices de vacunación, superando los cien casos. "El sarampión es una enfermedad muy peligrosa", explican en su web los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos." Y tan contagiosa que, si alguien tiene la enfermedad, el 90% de las personas a su alrededor también se infectarán si no cuentan con protección”