Influencia de la excitación emocional en la toma de decisiones al jugar - 3 views
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Isabel González on 07 May 11El artículo comenta la razón por la que un jugador, una vez ha estado jugando, no puede regular la cantidad de tiempo que pasa con el juego. Compara los efectos de la excitación sexual con los de la excitación emocional producida por los videojuegos, y explica cómo se modifican las decisiones del jugador en función del nivel de éste tipo de excitación.
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Isabel González on 07 May 11Me parece que no es suficiente con el estudio que se hizo sobre toma de decisiones en estado de excitación sexual para concluir que los jugadores tienen reacciones análogas al estar inmersos en un videojuego. Estamos hablando de dos contextos con consecuencias muy diferentes: por ejemplo, el tema de la sexualidad implica, como lo mencionaba el artículo, decisiones a nivel moral mucho más complejas. Y además, puede tener una repercusión a mucho más largo plazo que lo que se decida al jugar videojuegos. Claramente, escoger, por ejemplo, trasnochar jugando y llegar tarde al trabajo / estudio jamás va a tener una repercusión tan grande como las que implicaría el sexo originado por decisiones impulsivas. Por otro lado, el instinto reproductivo es mucho más fuerte en el ser humano que el de la gratificación instantánea por otros medios (en este caso, los videojuegos). Por eso pienso que, por mucha emoción que un juego produzca, nunca va a dificultar la toma de decisiones al nivel que lo hace el deseo sexual. Sería importante que se hiciera un estudio específico en este tema para los jugadores: tomar dos grupos (unos inmersos en el juego, los otros no) y determinar en qué casos ellos tomaron decisiones que podían ser potencialmente perjudiciales. Sin embargo, me parece que la explicación que hace el artículo sobre cómo el mercadeo aprovecha esto para conseguir más ventas, es muy coherente. Creo que en este momento casi todos los demos están diseñados de esa manera: cuando el juego llega a un punto muy emocionante, se acaban. De modo que el jugador esté en un nivel de excitación emocional lo suficientemente grande como para pensar en comprar el juego, algo que quizá no habría hecho si el demo no lo hubiera entusiasmado hasta ese punto de clímax.