Los
buscadores (“Search Engine”), entre otros componentes, constan de grandes bases
de datos donde se almacena la información que sus robots de búsqueda extraen de
la red. Cada buscador está configurado bajo una serie de parámetros que cada
compañía considera los más adecuados para ordenar las búsquedas y mostrar los
resultados.
Hoy por
hoy, los buscadores más conocidos son Google, Bing y Yahoo.
Te propongo un sencillo ejercicio: prueba a introducir las mismas palabras
clave de búsqueda en cada uno de ellos. Comprobarás que salen distintos resultados.
Esto se debe, como estamos comentando, a que los filtros de configuración y
rastreo son diferentes.
Ahora
bien, ¿puede un analista de Inteligencia, en la fase de obtención de
información, conformarse con el filtro que le imponen desde una u otra
organización? Como ya hablamos en otra entrada sobre los riesgos de confiarlo todo a Google no me voy a extender en el tema, simplemente,
recordar que un buen OSINT debería incluir rastreos en múltiples bases de
datos, entre ellas, también conviene tener en cuenta los buscadores del #socialmedia.
Mis palabras mágicas de hoy me llevan a reflexionar sobre cómo ampliar
el espacio de búsqueda en la red.
Para
ayudarnos a responder esta pregunta, existen los meta-buscadores
(“Meta-Search”), que podríamos decir que son los “buscadores de buscadores”.
Esto significa que sus filtros no se centran en la información que rastrean
y encuentran por la red, sino en la que recogen de los buscadores a los que
consultan.
Cuando
introduces una palabra clave en un meta-buscador, este encuentra resultados en
varios buscadores, por lo tanto, son magníficos para rastrear con
mayor profundidad la red.
A continuación te propongo 10 meta-buscadores que
pueden hacerte “la vida mucho más fácil”. No están en ningún orden. Cada uno es
muy bueno en un aspecto determinado.