Las hojas de estilo representan un avance importante para los diseñadores de páginas web,
al darles un mayor rango de posibilidades para mejorar la apariencia de sus páginas.
En los entornos científicos en que la Web fue concebida, la gente estaba más
preocupada por el contenido de sus páginas que por su presentación. A medida
que la Web era descubierta por un espectro mayor de personas de distintas procedencias,
las limitaciones del HTML se convirtieron en fuente de continua frustración,
y los autores se vieron forzados a superar las limitaciones estilísticas del HTML