muchos creen que las redes sociales (Twitter, Facebook, Instagram, Google+...) son gratuitas, pero no lo son. Las pagamos con nuestros datos personales, nuestros clics, nuestros Me gusta, las páginas que visitamos, las compras que hacemos...El mundo de la educación no está al margen de todo esto. El Big Data, las analíticas de aprendizaje... están emergiendo como una tendencia imparable.En mi opinión, el acto de educar siempre se ha basado y se basará en el análisis de datos. El docente, sea de forma consciente o inconsciente, está constantemente analizando los datos que recibe de cada uno de sus alumnos. Es una especie de sucedáneo de lo que en realidad es el Big Data, ya que la tecnología facilita el procesamiento y el análisis de estos datos a límites inimaginables hace unos años.