"Varios profesores de la escuela de negocios Texas A&M saben hoy algo que varias generaciones de maestros solo podían intuir: si los estudiantes leen los libros de texto.
Saben cuándo se saltan páginas, cuándo dejan de subrayar pasajes importantes, cuándo no se molestan en tomar notas o, simplemente, cuándo no abren el libro. "Es una especie de Gran Hermano, pero con buena intención", explica Tracy Hurley, decana de la escuela."