El planteamiento que defiendo, desde hace tiempo, al igual que desarrollan muchos otros colegas que pueden encontrar en la blogosfera, es alertar de que la incorporación de las TIC a la enseñanza –sea en la escuela, en la universidad o en la formación continua- debe mirar más allá de las tecnologías y no conformarse con realizar una pequeña innovación o cambio cosmético de las prácticas docentes habituales.