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Después de cuatro sesiones al alza, el WTI oscila entre ganancias y pérdidas ante menores expectativas de consumo tras la contracción de las manufacturas en China y la Zona Euro y la debilidad del desempleo en los EE.UU.

Aunque el ánimo del mercado mejora tras la exitosa colocación de deuda del Tesoro Público español y un mejor dato de manufacturas del esperado en Los EE.UU., los precios del petróleo todavía calibran el efecto del aumento de cuotas de la OPEP.

Pese a que los primeros acuerdos de la cumbre de la Unión Europea son favorables, el petróleo fluctúa entre ganancias y pérdidas presionado por la evidente desaceleración económica de la zona euro.

El enfriamiento del PMI de China y el hecho de que Grecia no ha logrado concretar un acuerdo sobre la quita de deuda con sus acreedores arrastra al petróleo, de acuerdo con el analista de Infosel.

El petróleo cotiza al alza apoyado en la recuperación del euro frente al dólar y el descenso en las peticiones de subisidios por desempleo en los EE.UU., que sugieren la recuperación de la economía del mayor consumidor de petróleo del mundo.

Los futuros del petróleo encuentran apoyo en la prohibición de las importaciones de crudo iraní por parte de los miembros de la Unión Europea a partir del 1 de julio de 2012, para forzar al país a abandonar su programa nuclear.

Según el experto de Infosel, la mejora de expectativas respecto a la demanda de petróleo tras los datos de pedidos de bienes duraderos y la contracción de los inventarios de crudo, impulsa los futuros del WTI por quinto día consecutivo.

Parece improbable que Irán cumpla su amenaza de cerrar el estrecho de Ormuz bloqueando el 40% del tráfico maritimo mundial, razón por la cual baja el petróleo tras haber registrado seis jornadas consecutivas de alzas.

Según el analista de Infosel, las ganancias del mercado energético obedecen más a las compras de oportunidad que al contexto económico y político actual en Europa o al movimiento del dólar.

Los precios del petróleo encuentran apoyo en las expectativas de que una serie de acuerdos políticos en Grecia e Italia podrían ayudar a resolver la crisis de deuda en Europa.

Pese a que el dato de empleo en los EE.UU. motivaba las compras matutinas de petróleo, el desacuerdo del G-20 sobre una nueva ampliación de recursos en el FMI acaba presionando al energético.

La escalada de la prima de riesgo de los bonos de España, Italia y Alemania pone en sobre aviso a los inversores que se alejan de los mercados ante las dudas de que Europa podrá contener la crisis de deuda.

Según el experto de Infosel, las compras de oportunidad y el aumento de las ventas al por menor y el índice de manufacturas de Nueva York en los EE.UU. apoyan la subida de los futuros del petróleo.

La expectativa de una mejora en el crecimiento de la economía estadounidense y los esfuerzos de la UE para contener la crisis de deuda impulsan los precios del petróleo que podrían registrar sus mejor semana desde abril de 2009.

Según el analista de Infosel, los futuros del petróleo retroceden tras tocar máximos de cinco meses por temor a que la crisis de deuda en Europa se siga extendiendo.

El petróleo toca máximos de nueve meses porque aún está incorporando que Irán dejo de exportar a Francia y a Reino Unido y que amenazó con hacer lo mismo con España, Alemania, Portugal, Holanda y Grecia.

El aumento de las existencias de petróleo en los Estados Unidos por tercera semana consecutiva anula el optimismo que reinaba en el mercado petrolero sobre el posible acuerdo de Grecia con sus acreedores.

Los futuros del petróleo encuentran soporte en las expectativas de un recorte en la producción de crudo tras las nuevas sanciones contra Irán impuestas por los EE.UU., Canadá y el Reino Unido, en respuesta a su programa nuclear.

El petróleo suma tres días de pérdidas por temor a que el Congreso en los EE.UU. no llegue a un acuerdo para reducir el déficit presupuestario y a que la crisis de deuda en Europa arrastre a la región a una recesión.

La persistencia de los problemas económicos en la Eurozona lleva a los futuros del petróleo a la baja, pese a que el debilitamiento del dólar favorece las compras de materias primas.