Una salida antes de lo esperado del estímulo de la Reserva Federal de Estados Unidos reavivará la crisis de deuda de la eurozona y empujando a los países más débiles a una "espiral de deuda-deflación", el Fondo Monetario Internacional ha advertido.
Tanto el Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra estuvieron alineados contra la decisión de la Fed a recortar el gasto de estímulo, comprometiéndose a registrar tasas de interés bajas. El BCE mantendrá su tasa en el 0.5 por ciento, y el Banco de Inglaterra ha hecho alusión a tasas más bajas.